EREVÁN, 30 DE NOVIEMBRE, ARMENPRESS: La Asamblea Nacional de Francia adoptó por unanimidad un proyecto de resolución destinada a exigir el fin de la agresión de Azerbaiyán contra Armenia y establecer una paz duradera en el Cáucaso Sur.

La Asamblea Nacional,

Visto el artículo 34-1 de la Constitución,

Visto el artículo 136 del Reglamento de la Asamblea Nacional,

Vista la Carta de las Naciones Unidas del 26 de junio de 1945,

Vista la tercera Convención de Ginebra del 12 de agosto de 1949 relativo al trato debido a los prisioneros de guerra,

Vista la Convención Europea de Derechos Humanos del 4 de noviembre de 1950, modificado por los Protocolos números 11, 14 y 15, completado por el Protocolo Adicional y los Protocolos números 4, 6, 7, 12, 13 y 16,

Vista la Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial del 4 de enero de 1969,

Vista la Convención sobre la protección del patrimonio mundial cultural y natural del 16 de noviembre de 1972,

Vista la Declaración de Alma Ata del 21 de diciembre de 1991,

Teniendo en cuenta la resolución 60/1 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, del 16 de setiembre de 2005, sobre la responsabilidad de proteger,

Visto el acuerdo de alto el fuego del 9 de noviembre de 2020,

Vista la resolución № 520 sobre la protección del pueblo armenio y de las comunidades cristianas de Europa y Oriente, adoptada por la Asamblea Nacional el 3 de diciembre de 2020,

Vista la Resolución 2021/2693 del Parlamento Europeo, del 20 de mayo de 2021, sobre los prisioneros de guerra tras el último conflicto entre Armenia y Azerbaiyán,

Vista la Resolución 2022/2582 del Parlamento Europeo, del 10 de marzo de 2022, sobre la destrucción del patrimonio cultural en Nagorno-Karabaj,

Considerando que las reiteradas agresiones de las fuerzas militares de Azerbaiyán en las regiones sur y sureste de la República de Armenia constituyen una violación de la soberanía de este Estado y del acuerdo de alto el fuego del 9 de noviembre de 2020 concluido entre los dos países;

Tomando nota de las reiteradas infracciones por parte de Azerbaiyán de los términos enunciados por el alto el fuego del 9 de noviembre de 2020, en particular la no restitución de ciertos prisioneros de guerra armenios y el no respeto del derecho al retorno y a la seguridad de las poblaciones desplazadas de Nagorno-Karabaj;

Considerando que la seguridad de las poblaciones armenias presentes en Nagorno-Karabaj no está garantizada hoy por Azerbaiyán en ausencia de cualquier compromiso de este último a este respecto;

Considerando la amenaza a la seguridad y a la vida de las poblaciones armenias de las regiones sur y este de la República de Armenia, mantenida por discursos belicosos e incitación al odio por parte de las autoridades azerbaiyanas;

Considerando que testimonios y videos muestran repetidas violaciones del derecho internacional humanitario cometidas por soldados azerbaiyanos contra civiles y militares armenios;

Considerando la reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas de los días 14 y 15 de setiembre de 2022, convocada a solicitud de Francia, que la presidió;

Considerando los esfuerzos realizados desde 1994 por Francia, y su constante preocupación, en el marco del grupo de Minsk, que copreside junto con Estados Unidos y la Federación de Rusia, por alcanzar una solución pacífica, duradera y concertada del conflicto en de conformidad con el derecho internacional;

Observando, sin embargo, la dificultad para que el grupo de Minsk cumpla conjuntamente su misión, tras el impacto del conflicto ucraniano desencadenado por la Federación de Rusia y el rechazo a su acción por parte de Azerbaiyán;

Tomando nota de la falta de iniciativa de la Federación de Rusia para hacer cumplir el alto el fuego del 9 de noviembre de 2020, del cual, no obstante, quiere ser garante;

Considerando los riesgos geopolíticos mayores que una escalada incontrolable del conflicto supondría para toda la región del Cáucaso Sur;

Recordando el contenido de la Declaración de Alma Ata de 1991, por la cual la República de Armenia y Azerbaiyán reconocen mutuamente su integridad territorial y soberanía;

Considerando el vínculo único que existe entre Francia y Armenia, expresado por el presidente de la República, señor Emmanuel Macron, el 12 de octubre de 2022;

Condena, en los términos más enérgicos, la agresión militar de Azerbaiyán de los días 13 y 14 de setiembre contra las regiones del sur y sureste del territorio de la República de Armenia, en violación de su soberanía;

Pide el fin de la ocupación militar por Azerbaiyán del territorio soberano de la República de Armenia y la retirada inmediata e incondicional de las fuerzas azerbaiyanas;

Pide el estricto cumplimiento de los términos de las declaraciones trilaterales del 9 de noviembre de 2020 y del 11 de enero de 2021;

Invita al Gobierno a trabajar en el seno de la Organización de las Naciones Unidas con vistas al despliegue de una fuerza de interposición internacional capaz de garantizar el fin de las hostilidades en el Cáucaso Sur y la seguridad de la población civil. Destaca la importancia del papel del Consejo de Seguridad para respaldar un acuerdo de las partes interesadas sobre el despliegue de dicha fuerza;

Pide al Gobierno que, en consulta con la Unión Europea y los Estados Unidos, tome cualquier iniciativa diplomática que pueda promover el desarrollo de un tratado de paz duradero entre la República de Armenia y Azerbaiyán;

Pide al Gobierno que intensifique los esfuerzos a nivel de la Unión Europea para adoptar una posición común destinada a promover la normalización de las relaciones entre Azerbaiyán y la República de Armenia;

Acoge con satisfacción, a este respecto, el despliegue de una misión civil de la Unión Europea destinada a restaurar la confianza, estabilizar la situación sobre el terreno y contribuir con las tareas de las comisiones de delimitación de las fronteras de la República de Armenia y Azerbaiyán;

También acoge con satisfacción el envío de una misión de evaluación de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa a Armenia, a petición del gobierno de Ereván;

Pide el necesario respeto de la soberanía territorial y la independencia de la República de Armenia, por parte de Azerbaiyán y todos los actores regionales, de conformidad con los acuerdos internacionales en los que son partes;

Pide la liberación inmediata e incondicional y la repatriación de todos los prisioneros de guerra armenios;

Pide al Gobierno que se movilice para que se pueda llevar a cabo una investigación internacional e independiente sobre los abusos que habrían sido cometidos por las fuerzas armadas de Azerbaiyán contra soldados y civiles armenios. Invita, con este fin, a la República de Armenia a unirse a la Corte Penal Internacional para luchar contra la impunidad;

Invita al Gobierno a considerar la imposición de sanciones económicas personales, en caso de que continúen los ataques y la ocupación del territorio soberano de la República de Armenia;

Invita a las partes interesadas, el Grupo de Minsk, la Alianza Internacional para la Protección del Patrimonio en Zonas de Conflicto y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura a hacer todo lo posible para preservar, de manera sostenible, el patrimonio cultural y religioso armenio en las zonas bajo control azerbaiyano del territorio armenio y Nagorno-Karabaj;

Invita al Gobierno a proseguir con sus esfuerzos de mediación y continuar movilizándose diplomáticamente para que se pueda implementar una solución duradera en relación con la seguridad de las poblaciones armenias de Nagorno-Karabaj, de conformidad con la resolución № 520 de la mencionada Asamblea Nacional;

Invita al Gobierno a aumentar el apoyo de Francia a la República de Armenia, en particular en lo que respecta a la ayuda humanitaria, y a estudiar el fortalecimiento de sus capacidades de defensa;

Destaca su compromiso inquebrantable con la búsqueda de una paz duradera, la única que permitirá la seguridad y la estabilidad en el Cáucaso Sur.