EREVÁN, 3 DE NOVIEMBRE, ARMENPRESS. El viceministro de Asuntos Exteriores de la República de Armenia, Parúir Hovhannisián, ve espacio para un cauto optimismo y la necesidad de dar pasos adicionales para restablecer las relaciones diplomáticas entre Armenia y Hungría. La declaración del viceministro se dio en el marco de la sesión conjunta de las comisiones permanentes de la Asamblea Nacional, durante el análisis del presupuesto nacional 2023 y como respuesta a la pregunta de la diputada Sona Ghazarián.
La diputada recordó que las relaciones diplomáticas entre Armenia y Hungría -Estado miembro de la Unión Europea- se vieron suspendidas, pero que recientemente, los ciudadanos armenios capturados fueron devueltos, gracias a la mediación de ese país. La pregunta apuntaba a saber si era posible restaurar la relación.
Hovhannisián explicó que hubo razones de público conocimiento que llevaron a la suspensión de las relaciones.
“Reconocemos el paso dado por Hungría el año pasado, que posibilitó la devolución de cinco prisioneros a Armenia. Después de eso, vimos algunos otros pasos tales como la ayuda brindada a la escuela «Gurguén Margarián» o las vacunas contra el coronavirus proporcionadas a Armenia”, dijo.
Recordó que tras su renovación, recientemente se realizó la reapertura de la iglesia católica armenia de Budapest, para lo cual el patriarca de la Iglesia Católica Armenia viajó a ese país y mantuvo una reunión con el presidente de Hungría.
"En otras palabras, vemos ciertos avances en esa dirección. Por supuesto, como dijimos antes, estamos dispuestos a solucionar esta situación de manera adecuada. Se requieren otros pasos. Creo que hay espacio para un cauto optimismo”, dijo el viceministro.
El 19 de febrero de 2004, Ramil Safarov, oficial del ejército de Azerbaiyán, asesinó a hachazos mientras dormía al oficial del ejército de Armenia Gurguén Margarián. El hecho ocurrió en Budapest, donde ambos oficiales participaban en cursos organizados por la OTAN. La justicia húngara condenó al asesino a cadena perpetua, equivalente a treinta años de cárcel sin derecho de indulto. Pasado un tiempo, Hungría extraditó a Safarov a Azerbaiyán, donde no solo se le recibió con todos los honores, sino que se le acreditó un rango superior en el escalafón militar, con el grado de mayor. El 31 de agosto, el Consejo de Seguridad Nacional de Armenia dispuso la suspensión de las relaciones diplomáticas con Hungría.